Al llegar encontramos una zona destinada al aparcamiento de coches y justo al lado entramos en la zona de picnic, acondicionada con decenas de mesas, algunas con carpa para evitar el sol o la lluvia...
A la derecha de la zona de picnic hay unas dunas donde los peques se lo pasan genial jugando en ellas.
A las izquierda ponemos visitar el museo donde se exponen varias curiosidades del paraje natural protegido.
Siguiendo el camino nos lleva a descubrir los rincones de esta maravilla de la naturaleza... hay varios bunkers a lo largo del recorrido, a los peques le llama mucho la atención escuchar la historia, es toda una aventura.
Justo al lado de uno de los bunkers más grandes se encuentra una torre de madera desde la que divisar toda la zona cual soldado en aquella época.
Otra de las cosas que más les gustan a los niños, y no tan niños, es el mirador del lago... donde muy silenciosamente podemos ver a las diversas especies que habitan en el.
A lo largo del recorrido de sus caminos podemos observar variedades vegetales difíciles de encontrar cerca.
Es un lugar perfecto para pasar el día en familia o con amigos.
Os dejo otras ideas para visitar cerca, como el
Parque Reina Sofía o
El Palmeral de Alicante.
Nos vemos en las redes ;)