Brindar con oro en la copa, ropa interior roja, quemar los propósitos para el nuevo año y que no se nos olvide dar el primer paso con la derecha...
Mil y un rituales para la noche de las 12 uvas, para despedir el año y dejar atrás lo malo, para empezar con buen pie el primero de los 365 días que tenemos por delante.
Con la misma magia que ese anillo de oro desprende cuando brindas con el en la copa y sabes que a partir de ese momento la suerte está contigo en cada uno de los días de este nuevo año, y que aunque alguien te deje un pedacito triste miraras en tu mano y todo estará bien.
Y darás un paso al frente con el pie derecho igual que el primer paso que diste del año, pero lo darás con tanto impulso que con el vendrán todos aquellos deseos que pediste y con tanta fuerza que empezaras a cumplirlos, sin magia, sin rituales, solo tu y tus ganas de hacer que pase todo lo que habías escrito en ese papel que quemaste junto a los pedacitos que no te gustaban.
Cuando te des cuenta estarás volviendo a estrenar ropa interior roja, porque para que de suerte hay que estrenarla, y brindando después de comerte al son de las campanas la última de las 12 uvas, y los pedacitos de este año ya habrán encontrado su sitio y tu seguirás recomponiéndolos como mejor te sienten, como más te gusten, como tu los quieras recomponer.
Sígueme en